El joven sonero Anthony García, vocalista de nuestro Gran Combo de Puerto Rico, vuelve a ser noticia. Como es de todos conocido, meses atrás cuando fue escogido para formar parte de tan insigne agrupación fue el centro de curiosidad, opiniones y un poco de controversia también.
La verdad es que el muchacho, que además de ser un extraordinario sonero es músico, compositor y arreglista (para el que no lo sepa) ha venido desempeñándose con soltura en el Combo, que este año acaba de cumplir sus 54 años de fundación.
La entrada de Anthony a “Los Mulatos del Sabor” resultó ser más significativa de lo que aparentó.
Se convirtió en una especie de puente generacional, un abrazo entre veteranos y noveles talentos que en este caso le daban un sentido real a eso de ir a estudiar y graduarse de “La Universidad”. Es una prueba fehaciente de que en la unión está la fuerza, y que ese proceso de retroalimentación salsera entre generaciones va a dar muy buenos frutos para el disfrute del público seguidor de este género.
Recientemente el amigo Anthony tuvo la genial idea y la iniciativa de utilizar su talento para la improvisación y llevar un mensaje a sus hermanos puertorriqueños. Utilizó las redes sociales y, lanzando un reto amistoso a los demás soneros jóvenes, creó un movimiento hermoso a través del cual los muchachos, además de demostrar su genuino talento, alientan a los boricuas a que echemos pa’ lante en las buenas y malas.
En estos días cuando las malas noticias sobre violencia, política, economía, terrorismo, entre otros, llega la idea de nuestro Anthony como un bálsamo.
Sí, las redes sociales también sirven para cosas positivas, y lo vemos a diario. Yo sé que los detractores pensarán que esto es un esfuerzo banal, pero pienso que se equivocan.
La gente escucha, se divierte, descubre talento genuino y piensa.
Es digno de admirar que estos jóvenes, que como ya les he dicho la han pasado y la están pasando bien dura para poder tener éxito en sus proyectos -y que han trabajado y siguen trabajando duro-, envíen mensajes de positivismo y de sentimiento nacional.
Pudieron utilizar la oportunidad y quizás expresar sus frustraciones o quizás reprochar no tener el éxito que merecen. Eso, en mi opinión, habla muy bien de ellos y de su deseo de tener (igual que todos queremos), un mejor lugar para vivir.
Me alegra saber que eso es solo una muestra de que hay futuro en nuestra juventud.
Aunque no con la misma posición que nos llegan las malas noticias, algunos medios de comunicación nos enseñan las hazañas de empresas y esfuerzos que está haciendo nuestra juventud para tratar de mejorar nuestro país y borrar la idea de que la juventud es indiferente a la realidad actual.
Gracias al amigo Pirulo, que me coló entre los jovencitos, pude participar en el reto.
Lo importante es que moviste a tus compañeros, moviste a tu gente, y eso, Anthony, denota liderato y, sobre todo, respeto de tus iguales hacia ti.
Un abrazo y muchos éxitos más junto a “Los Mulatos del Sabor”. ¡Bravo, Anthony!
Camínalo.Gilberto Santa Rosa
