Al hacer un recuento de su vida y repasar los momentos más difíciles que ha atravesado y que a la vez le han brindado el mayor aprendizaje, el cantante tropical Luis Enrique siempre llega al mismo punto: tenía 15 años cuando cruzó la frontera junto a su familia para llegar a Estados Unidos.
Era un joven ilegal que vivía con miedo al futuro; no sabía inglés y no quería aprenderlo porque pensaba que así podría regresar a su natal Nicaragua; y debido a su condición de indocumentado no llegó a cumplir su sueño de ser maestro de música para niños con condiciones especiales por no haber podido estudiar en la universidad.
El antes y después de ese Luis Enrique que vivió 10 años sin papeles en tierra estadounidense llenarán las páginas de un libro autobiográfico que el intérprete de “Yo no sé mañana” escribe con la expectativa de que al compartir su historia pueda inspirar a sus fanáticos a perseverar. La publicación, que debe estar lista para el próximo año, es la mayor prioridad para el artista durante el 2016, aun cuando se asoma para él una gira de conciertos, según indicó el vocalista al ser entrevistado por este medio durante un recorrido por el Museo de Arte de Puerto Rico.
“Voy a contar un poco mi trayecto desde que salí de Nicaragua hasta llegar a Estados Unidos. Voy a hablar de mi familia, por su puesto, mi entorno, los primeros años de mi niñez, y lo importante que ha sido este trayecto y la enseñanza que a través de todas estas experiencias me ha quedado. El propósito también del libro es contar mi historia de inmigrante, de haber bregado con eso y de haber salido adelante. Siempre de una manera digna, con una perseverancia increíble y con una visión hacia el infinito porque yo no tenía claro qué iba a pasar conmigo”, detalló.
El vocalista recordó lo difícil que fue ese periodo de haber dejado atrás su vida, su país y sus amigos para empezar una nueva en un lugar desconocido.
“Me tomó unos buenos dos años para lograr yo caer en cuenta de que realmente tenía que aprender inglés porque yo estaba en Estados Unidos y no quería aprender inglés, pensando en que así me iban a decir ‘vamos a enviar a este muchacho de vuelta a Nicaragua’. Lo más dificultoso realmente fue cuando realicé finalmente en ‘high school’ lo que era ser ilegal cuando vi que no podía llevar a cabo muchas cosas que yo quería, entre ellas seguir a la universidad”, rememoró.
Aunque en abril debe arrancar su serie de conciertos, precisó que su enfoque durante este año es el libro. Lo demás, girará en torno a la publicación.
Conexión con las artes
Como parte de la gira, el cantautor espera poder presentarse en Puerto Rico en septiembre. Pero para calentar motores en el país que considera su segundo hogar, Luis Enrique actuará como artista invitado, este sábado, en la Gran Gala Anual del Museo de Arte de Puerto Rico, que este año fue denominada “Caribe impresionista: Un viaje junto a Francisco Oller y sus amigos: Monet, Cezanne, Coubret, Pisarro”. El evento se celebrará en el Hotel Sheraton del Centro de Convenciones de San Juan, a las 8:00 p.m.
Durante la visita del salsero por el museo, este destacó lo importante que es para él continuar aprendiendo sobre el arte y la cultura puertorriqueña.
“Yo viví aquí seis años y a través de la música fue mi primera conexión con este país, pero de las artes plásticas definitivamente me queda un mundo por conocer y que bonito es tener esta oportunidad”, indicó quien quedó impresionado con la obra del pintor puertorriqueño Francisco Oller.
Sobre el espectáculo que presentará en la gala, comentó que estará acompañado por la orquesta del maestro Ángel “Cucco” Peña y que cantará tanto temas de su repertorio como temas puertorriqueños.
Periodista desinformado
Por otro lado, la voz de “Date un chance”, quien hace poco se estrenó como bloguero, habló sobre una entrevista reciente en cual fue abordado por un periodista desinformado que aludió a sus supuestos problemas con las drogas y múltiples matrimonios.
Aunque en un inicio se molestó y lo consideró una falta de respeto, explicó que quiso utilizar a su favor el tema de su problema con las drogas a su favor, y reiteró, tal como lo hizo en su blog, que vio amigos morir o destruir sus vidas y las de sus familias a causa de la adicción.
También cuestionó el planteamiento del periodista sobre sus varios matrimonios y bromeó al preguntar “ni idea (de donde sacó esa información), es más, yo quiero preguntarle eso a él. Dónde están los anillos, los matrimonios”.
En ese sentido, dijo estar feliz junto a la pareja con quien tiene una relación de varios años.
“Estoy muy contento. En esta carrera si tu vida personal no está equilibrada y cada vez que llegas a casa no encuentras un ambiente de armonía, de paz y de tranquilidad, pues eso ya es muy difícil porque esta carrera ya, de entrada, es bastante dura. Entonces, si no tienes una compañera que te ayude a mantener ese equilibrio es un tanto complejo este asunto”, abundó.
Además señaló que le gusta mantener los asuntos del corazón lejos de su vida pública por respetar la privacidad de su pareja.
“Las relaciones son dos personas, no soy yo nada más, cualquier cosa que yo exponga le estoy quitando el derecho de la privacidad de la otra y a mí no me gustaría que me hicieran eso. Si en una relación se está de acuerdo en que vas a hablar de ella o que la vas a presentar, pues bendito sea Dios, lo haces, pero no, uno no puede estar por ahí regando su vida privada”, argumentó.
De otro modo, el cantante de 53 años contó que ha adoptado un estilo de vida más saludable porque su rendimiento en el escenario se lo estaba exigiendo y tras haber sido sometido a una cirugía del colon hace dos años. Como parte de su régimen, optó por dejar la comida chatarra. Además, se encuentra trabajando en un plan de acondicionamiento físico junto a un entrenador personal, que consta en caminar y hacer ejercicios en el gimnasio.
Brenda I. Peña López