LA HABANA, Cuba.- Laydenis es una mesera de la fondita “Plan B Lechón Pío” que cuando se le pregunta por cuál es el artista boricua quiere ver cantando en Cuba, responde toda emocionada: “¡A MarcAnthony!”.
Lo mismo le pasa a Yoanky, quien se dedica a limpiar casas para ganarse la vida. El Nuevo Día la sorprende tarareando las canciones del salsero puertorriqueño con un fervor particular y al preguntársele sobre la posibilidad de que Anthony llegue aquí a sonar su música afirma: “¡Es que yo me muero si ese hombre viene”.
Esa simpatía de los cubanos por Marc Anthony no es sólo femenina. Dos oficiales de la Policía Nacional Revolucionaria se acercan al vehículo de El Nuevo Día en una de las calles habaneras y le piden “botella”, la versión cubana del “pon” boricua. Porque sí, aquí hasta los policías llegan a su trabajo en “pon” y es mejor cooperar con ellos. Cuando ellos escuchan en la radio a Marc Anthony a todo dar, se ponen a cantar con entusiasmo y uno de los dos, un moreno grandote y corpulento, dice: “que venga pará acá el boricua ese, que esto se va a poner en candela, aquí hasta de Guantánamo van a venir a verlo”.
En Cuba esperan con ansias a Marc Anthony. Casi todos los que hablan con El Nuevo Día para otros artículos o simplemente como parte de la vida diaria, siempre hacen la misma pregunta: “¿viene o no viene Marc Anthony?”.
El fanatismo aquí por la música del cantante criado en Nueva York es enorme y la discusión se da a niveles de detalle, como si hay un espacio lo suficientemente grande para recibirlo o si vendrá al país acompañado del dueto cubano “Gente de Zona” o hasta de su exesposa J-Lo.
“Eso de los Rolling Stones se quedará pequeño con Marc Anthony, pequeño”, dijo a El Nuevo Día el joven cubano Ariel Morales, un fanático a morir de Marc Anthony, al referirse a la actuación de la banda británica en suelo cubano, que según estimados del grupo rockero superó el millón de personas.
Los cubanos esperan que Marc Anthony se presente aquí de forma gratuita, para que todo el pueblo pueda verlo.
“Por ahí se dice que sus presentaciones van a ser en algún lugar privado. Yo no podría pagar eso. Espero que venga y nos cante gratis, no se va a arrepentir”, dice Laydenis.
Lo cierto es que hasta ahora no hay nada concreto, sólo de esos rumores que en Cuba acaban convirtiéndose en realidad, como pasó en su momento con Olga Tañón y los Stones, y ahora con MarcAnthony y “Maroon 5”.
Orlando Bistel es el presidente del Instituto Cubano de la Música. Es la máxima figura del tema musical en Cuba y si Marc Anthony viene para acá, él debería saberlo. El Nuevo Día cruzó con él en una actividad y le hizo la pregunta obligada.
END: ¿Marc Anthony viene o no viene?
OB: Bueno, no me atrevo a decirlo. Nosotros no hemos hablado y normalmente estas cosas las hablamos directamente con el artista y no ha pasado.
Bistel no dijo que venía, pero tampoco que no. Eso significa en el lenguaje de esta isla, que algo se está cocinando y, claro está, para que se cumpla el sueño de Laydenis, Marc Anthony tendrá que poner mucho de su parte y hacer posible que su potente voz suene en La Habana, en el que podría convertirse en el concierto más grande que jamás se haya hecho aquí.
Benjamín Morales Meléndez