Los años, o la longevidad, no son determinantes para definir a un veterano. De hecho, en el caso del ejército (confieso que no soy muy ducho en el tema de la milicia) existen veteranos de diferentes edades que adquieren su título por los conflictos bélicos en que hayan participado.
A la industria musical muchos la han comparado con un campo de batalla. La verdad es que, en ese sentido, cada día se hace más difícil dar a conocer un proyecto musical.
Hace doce años, en medio de una época muy dura para la música en general, pero más aún para la salsa, dos jóvenes músicos y cantantes decidieron emprender el duro camino de establecer una agrupación musical.
Contra viento y marea, y todos los no tan positivos pronósticos de algunos “sabios” del ambiente, se creó el dueto salsero NG2. A fuerza de talento genuino y trabajo duro impusieron su estilo, su dinamismo y su música; mezcla de la tradición con lo moderno acompañados de las nuevas tendencias en la música popular en general.
Ser original, en este tiempo, es muy difícil… NG2 lo es.
Sus creadores Norberto Vélez y Gerardo Rivas han podido combinar muy bien su formación musical con su gusto personal, su gusto colectivo y el formato clásico de una agrupación salsera. A esa refrescante fórmula le añadieron el lenguaje musical de su generación.
Era de esperarse la riqueza musical que iban a ofrecer, puesto que ya tenían, cada uno por su lado, experiencias trabajando como músicos para otros grandes artistas de la talla de Elías Lopés y Víctor Manuelle.
Fue en la orquesta del “Sonero de la Juventud” que se juntaron estos dos talentos. Compañeros de cuarto en los viajes, comenzaron a experimentar lo que eventualmente se convirtió en su proyecto. Crearon un demo y Víctor lo escuchó, le gustó y lo presentó a Sony.
Ángel Carrasco, jefe entonces de artistas y repertorio de Sony, quedó encantado con lo que Víctor le mostró y es así como surge la oportunidad de grabar su primer disco. Dicho sea de paso, lo grabaron sin que el grupo tuviera un nombre oficial. Es Ángel Carrasco quien bautiza la agrupación como NG2.
Desde su formación, Norberto y Gerardo han probado las mieles del éxito, lo amargo del fracaso, han experimentado la bendición del cariño del público, lo difícil de mantenerse y de mantener una agrupación. Su experiencia les sirvió para esto, y tuvieron que vivir y aprender de vivencias nuevas para mantener su proyecto vivo y exitoso.
Otras agrupaciones se organizaron para la época; algunas desaparecieron ya, pero NG2 sigue ahí, haciendo música, innovando y dando lo mejor de su talento para demostrar que la experiencia y la juventud pueden vivir en la misma casa sin problemas.
Seis discos, incontables presentaciones, éxitos en la radio y el respeto ganado por estos dos grandes artistas por sus iguales sumado a su público seguidor, hacen de esta singular agrupación una de admirar. Desde noviembre del 2004 hasta hoy día, siguen los muchachos batallando, deleitando al público y siendo ejemplo para que otros jóvenes talentosos se armen de valor y comiencen a caminar para lograr sus sueños.
Ha sido dura la batalla que han librado por estos pasados 12 años. Las satisfacciones inmensas y, como todavía falta camino por recorrer, habrá obstáculos que vencer y logros por alcanzar; me consta que en eso andan.
Puede usted participar en un largo conflicto bélico y ser tan veterano como alguien que participe de un conflicto más corto, pero, al final, resultan ser veteranos los dos.
NG2, con apenas 12 años de fundación son, para mí… veteranos de la salsa joven. ¡Valga la comparación!
¡Camínalo! Gilberto Santa Rosa