Quiero morir cantando” es una frase que muchos artistas utilizan con frecuencia en sus entrevistas. Pero lo que menos el público espera es que la muerte de su ídolo le sorprenda en pleno concierto.Otra vez en el mundo del espectáculo se conmueve con el fallecimiento del músico congolés Papa Wemba, conocido como el “padre de la rumba congolesa”, a los 66 años, luego de desplomarse en el escenario durante un concierto en Costa de Marfil. El ministro de Cultura marfileño, Baudouin Banza Mukalay, confirmó ayer la muerte. Dijo que se trata de una “gran pérdida para el país y toda África”. Imágenes del concierto en Costa de Marfil muestran a sus compañeros de presentación corriendo a su lado luego de que el músico se desplomó frente a miles de aficionados. Fue llevado a una clínica cercana, pero no pudo ser reanimado. No se supo por el momento la causa de su muerte.
“Fue un hombre que salió adelante por sí mismo, un modelo a seguir para los jóvenes congoleños”. El músico, cuyo nombre verdadero era Jules Shungu Wembadio Pene Kikumba, saltó a la fama en la capital congoleña de Kinshasa durante la década de 1970 con la banda Zaiko Langa Langa, cuya fusión de estilos de bailes americanos y africanos, basados en la guitarra, inspiró a una generación de músicos africanos. Con una banda nueva llamada Viva La Música, Wemba se mudó a París en la década de 1980 y ayudó a popularizar la música congoleña más allá de África. En la década del 90 se unió a una gira con el astro de rock británico Peter Gabriel y apareció en su álbum “Secret World Live”.
Un suceso similar vivió el público italiano cuando el Giuseppe Pino Mango murió, a los 60 años, tras sufrir un infarto en medio de un concierto en la localidad de Policoro. Cuando el popular músico comenzó a sentirse mal arriba del escenario, levantó la mano para pedir disculpas y se desvaneció ante todo su público víctima de un ataque cardíaco. Miembros de su equipo subieron inmediatamente al escenario para ayudarle y fue trasladado a un hospital cercano, donde murió poco después.
El pasado año, Fernando Echavarría, el creador dominicano del “fusón” y líder de la Familia André, murió, a los 62 años, cuando se preparaba para subir al escenario en un concierto en Santo Domingo.
En pleno show
Hace pocos días, la noticia del deceso de la cantante pop indonesa Irma Bule recorrió el mundo. La intérprete acostumbraba a llevar serpientes a sus conciertos con el fin de hacerlas un atractivo visual, sin embargo, dicho acto terminó llevándola a la muerte. La joven de 29 años se encontraba dando un show en Karawang, Java Occidental. Todo parecía ir normal hasta que una de las cobras la mordió en un muslo debido a que Bule, sin darse cuenta, la pisó en la cola.
El pasado mes, los asistentes a un concierto quedaron aterrados cuando el líder de la agrupación “Sueños Stereo”, Marcelo Zapata, vocalista de la banda tributo al grupo liderado por Gustavo Cerati, se desvaneció sobre el escenario y murió al igual que su ídolo. La fiesta se acabó en medio de la histeria cuando el show casi finalizaba y Marcelo Zapata interpretaba “Té para 3”. En ese instante, el músico de 47 años se desvaneció.
En 2013, la acróbata francesa Sarah Guyard falleció tras haber caído desde una altura de más de 15 metros mientras participaba en un espectáculo del Circo del Sol en Las Vegas.
José Nova