La impaciencia y el desespero ganaba terreno en los miles de asistentes que esperaban con ansias a Víctor Manuelle, pero el primer tono de “Ella lo que quiere es salsa” hizo que el público recibiera en el Poliedro de Caracas al cantante puertorriqueño con la mejor de las ovaciones.
El también llamado sonero de la juventud realizó una impecable presentación en la que temas como “Ando por las nubes”, “Agua bendita”, entre otros éxitos, fueron coreados por el eufórico público, en casi dos horas de show y 18 canciones interpretadas.
“Buenas noches Venezuela, es un placer compartir nuevamente con ustedes luego de dos años sin presentarme en este país”, fueron las primeras palabras del cantante al subir a la tarima.
Más temprano estuvo animando la velada Tambor Urbano, con todo su sabor caribeño, que hizo bailar a más de uno. Luego siguieron los muchachos de Proyecto A, quienes tocaron lo mejor de su repertorio, junto a el famoso Coquito y Alfredo Naranjo, haciendo que los asistentes gozaran de una hora aproximadamente de sus canciones.
La gran sorpresa de la noche fue cuando el sonero de la juventud llamó al escenario a Oscarcito para interpretar “Si tu me besas”, tema de su autoría, que caló en los primeros lugares de sintonía. Aquel momento fue único para los presentes, ya que no se esperaban la llegada de este gran cantautor venezolano.
En la parte final del espectáculo, el puertorriqueño conmovió los sentimientos de más de uno, cuando hizo la presentación de su tema “Algo le pasa a mi héroe” dedicado a su padre, quien sufre de Alzheimer. Por medio de unos videos, el cantante narró parte de su vida junto a su progenitor y expresó lo triste que es tener a una persona que padezca esa enfermedad.
Como era de esperarse, el show lo cerró con su más reciente promocional, “Que suenen los tambores”.
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