El nuevo Samsung Galaxy S6 es, en efecto, un terminal elegante, muy en la línea de los anteriores Alpha y Note 4, que estrenaron las primeras carcasas metálicas de la firma coreana y que tan buenas críticas han cosechado desde su lanzamiento. Peron el protagonista son las curvas. El nuevo terminal cuenta con un chasis unibody que le da consistencia y el plástico, por fin, ha sido sustituido por materiales mucho más nobles y al gusto de los usuarios como el metal.
A diferencia de los modelos anteriores, la firma surcoreana ha decidido dar de lado a Qualcomm en el montaje de uno de sus principales componentes, el microprocesador, para optar por un ocho núcleos capaz de alcanzar velocidades de reloj de 2.1 Ghz de fabriación propia: Exynos 7420.
El terminal estrena una plataforma de pago propia, Samsung Pay, que llegará a Europa este mismo año. Además, el S6 se puede cargar de forma inalámbrica, con sólo dejarlo sobre una plataforma de inducción. Como destaca el ejecutivo de Samsung, no se trata de una evolución, sino de algo totalmente nuevo y revolucionario. También destaca que, tanto el modelo estandar como la versión de laterales curvados, elGalaxy S6 Edge, llegan con 3 GB de memoria RAM y memorias de almacenamiento de 32, 64 y 128 GB.