Antes de entrar de lleno en el tema de esta semana quiero disculparme con el Sr. Elí Irizarry, organizador del Congreso de la Salsa de Puerto Rico.
La semana pasada, por un error involuntario no mencioné al Congreso como una de las iniciativas hechas con la “salsa” y específicamente, con el baile como protagonista, que por más de 20 años ha aportado al turismo de nuestra isla y en algunos países de Europa y Asia ha dado a conocer nuestra isla y a nuestros artistas salseros.
Ser injusto no ha sido nunca mi intención y reconozco la labor de este congreso, de sus organizadores y participantes.
Aclarado el punto, vamos al tema de esta semana.
El género salsa es uno con historia, carácter y voz propia. La trayectoria y vigencia del género hablan por sí solas.
Dicha historia se compone de varios capítulos y todos son importantes para entender y analizar el género. Una de las etapas sin duda alguna fue la del Boogaloo. Un sonido urbano nacido en la ciudad de Nueva York previo al período de la “Salsa” y que tuvo un gran éxito, aunque efímero, a mediados de los sesenta.
Grandes figuras en ese entonces, jóvenes innovadores y aventureros crearon una música y un sonido mezclando todas sus influencias musicales con su realidad social de vivir en el “barrio” en la Gran Manzana.
No soy historiador y mucho menos experto, pero sí me considero un curioso y estudioso. En mi búsqueda di con un excelente documental llamado We Like it Like That, que cuenta de una manera (según mi criterio) la historia del Boogaloo a través de sus creadores y con personas de diferentes sectores que vivieron la época. Hablan de una manera veraz sobre aspectos no solamente relacionados con la música, sino también de la vida de los latinos (especialmente puertorriqueños) en las calles del famoso “barrio”.
Los productores Elena Martínez y Mathew Ramírez se ocuparon de cubrir la breve, pero interesante historia de este tipo de música con, inclusive, la opinión de detractores, y expone las teorías de cómo y por qué fue tan efímero el éxito de este movimiento musical y cuáles fueron las causas para su desaparición del gusto popular.
Una buena mezcla de nostalgia (para el que vivió la época) con explicaciones musicales técnicas hacen de este un documental interesante e indispensable para entender en esa época la aportación y los efectos sobre nuestro género.
Johnny Colón, Joe Bataan, Pete Rodríguez, Richie Ray, Joey Pastrana, Benny Bonilla, Joe Cuba, Jimmy Sabater, Ángel Lebrón y Bobby Marín son algunas de las figuras que cuentan esta maravillosa historia.
De igual manera la periodista y músico Aurora Flórez, y el locutor poeta y activista Felipe Luciano hacen una gran aportación a que la narración sea una muy efectiva para los que, como yo, nos interesamos de estos temas.
A los músicos de cualquier generación y, especialmente, mis colegas jóvenes que están luchando fuertemente en estos días para alcanzar su lugar dentro de esta música, se los recomiendo.
De igual manera el público en general espero disfruten We Like it Like That… ahí les dejo mi recomendación.
Camínalo…Gilberto Santa Rosa