Se generaliza que ya no se venden tantos discos como antes. Pero nuestros artistas no escatiman y prefieren crear, canalizando sus talentos en una diversidad de conceptos discográficos de excelencia.
Antes de que finalice el 2016, es menester echarle un vistazo a la cosecha más reciente y comentar sus propuestas en reconocimiento a su compromiso con la buena música y como guía o referencia para los melómanos y lectores de este medio alternativo. ¡Felicidades!
La Banda Acústica Rodante
Querido Rafael
El primer disco del colectivo que integran los cantautores Nore Feliciano, Mikie Rivera, Tito Auger, Rucco Gandía y Walter Morciglio es dedicado en vida al patriota Rafael Cancel Miranda, símbolo de la lucha de Puerto Rico por su libre determinación.
Inspirados por la gesta de don Rafael, la Banda Acústica documenta musicalmente la historia del ex preso nacionalista mediante un cancionero de trovas, rock y baladas en que integran e intercalan sus voces y versos.
La secuencia la encabeza la Camerata Coral de Puerto Rico, dirigida por Amarilis Pagán-Vila, con su interpretación de “¿Dónde están los muertos?” Y luego los cantautores intercalan sus interpretaciones de temas como “Nunca de rodillas”, “El ataque”, “Un primero de marzo”, “No lo podrán hacer”, “Querido Rafael” y “Canción para don Rafa”.
Otro ejemplo del impacto de la política y sus protagonistas en la música popular.
Gomba Jahbari
La vieja senda
El alma de Gomba Jahbari es el cantautor e instrumentista Carmelo Romero, cuyo estilo vocal e interpretativo del reggae es muy original.
La banda se ausentó durante varios años del medio discográfico, pero nunca dejó de crear música y tocar. La conversión de Carmelo al cristianismo hace ya casi una década a veces es evidente en sus letras, con mensajes de filosóficos de paz, reconciliación, fe, perseverancia, optimismo, de amor a la pareja y crítica social, como se aprecia en composiciones como “En la espera”, “Hermanos”, “Amor y paz”, “La situación” y otras.
Gomba Jahbari ha sido una banda de reggae muy exitosa en la adaptación de canciones de la salsa al ritmo jamaiquino. Años atrás experimentaron con “Las tumbas” del repertorio de Ismael Rivera y en esta ocasión se anotan un acierto con su versión de “Que locura enamorarme de ti”, popularizada por Eddie Santiago.
A la producción de “La vieja senda”, en que –como se escucha en “La situación”- favorecen la legalización de la mariguana, se unieron como invitados Guillermo Bonetto, de la banda Los Cafres, e Inesta. Un gran disco.
Mónika Nieves
Pasajeros del tren
El concepto que la cantautora Mónika clasifica como ‘jiba-rock’ retoma con mucha más madurez y sustancia en sus letras el experimento musical que en 2003 plasmó discográficamente con el debut de la banda Puerto Raíces, dirigida por su hermano Christian Nieves.
Con Christian al frente de los arreglos, del cuatro y el tiple en “Pasajeros del tren”, Mónika supera, como comentamos en una reciente entrevista, las expectativas al sorprender con un concepto de rock integral en que convergen con naturalidad la bomba, el flamenco, la música country, el doo-wop y otros ritmos.
La balada rock “Mírame bien” es una de las composiciones de mayor fuerza e intensidad de una secuencia en que predominan las letras de desamor típicas de las relaciones entre adolescentes y jóvenes.
Puerto Canción
Como la marea
Las voces de Eduardo Cautiño, Alix Priscila y Sammy Vélez se escuchan armonizadas a la perfección. Sus guitarras acústicas dictan la pauta en los arreglos. Y sus letras son poesía sencilla y actual, rica en metáforas e imágenes marinas. Ese fue el sentimiento de la primera audición y así lo reafirmamos al retomar la entrega de Puerto Canción para la reseña que nos ocupa.
El disco “Como la marea”, en que convergen la trova, el blues, el son y el rock en un concepto que clasifican como ‘country folk’, se nutre de micro obras de arte como “Soy capitán”, “Por la vereda del sol”, “Naufragar en ti”, “La marea”, “Esperando por ti”, “Todo me habla”, “A través del universo” y “El faro”, letras alentadoras, optimistas, de buenas vibras que invitan a la introspección y comunican paz. Una de las sorpresas más gratas de 2016.
Orquesta El Macabeo
La maldición del timbal
Al inicio de su carrera, hace ocho años, la referencia de Macabeo fue el sonido disonante de bandas sin mucha escuela en la década de 1970, como Orquesta Zodiac, Corporación Latina y la Orquesta Mundo.
Hoy Macabeo ha forjado su identidad con una sonoridad sencilla, sin pretensiones de estética y sofisticación; todo lo contrario: salsa revolucionaria, como sus letras que echan mano a metáforas de la cotidianidad, del ciudadano de a pie que su fanaticada les pide a gritos en El Boricua o La Respuesta por la eficacia de su fórmula, basada en el humor negro y el sarcasmo social.
Escuchen “Crucero”, “Armonía”, “Saco e trampa”, “La función”, “La buena voluntad”, “Rutina”, una salsa con samba, y “Carrera”, dedica a nuestros padres cuando llegan a la tercera edad, y se convencerán de que Macabeo satiriza en serio y en broma, a ritmo de su salsa irreverente, la sociedad boricua del Siglo XXI.
Kayvan
En otra esquina
“En otra esquina” es uno de los aciertos de la salsa producida durante 2016 en Puerto Rico. Esta entrega distingue a Kayvan Vega del resto de los exponentes salseros porque supo capturar discográficamente el sentimiento y la intensidad de una presentación en vivo, ya sea en un baile, en una fiesta patronal o en un masivo como el Día Nacional de la Salsa.
Los arreglistas Julio Badillo y Javier Quintana entendieron muy bien lo que Kayvan deseaba grabar. Basta escuchar su versión de “Me tienes loco”, grabada por Ismael Rivera, “La lengua” de Adalberto Álvarez y el clásico Tu cintura con la mía” de Toñin Romero. Es pura salsa de barrio y esquina; del sonero que sube a la tarima a guapear y a desafiar la clave cantando a la vida y sus cosas en la urbanidad.
Aníbal de Gracia y sus invitados
Dejando huellas
Una constelación de estrellas. Primerísimos talentos de la salsa aceptaron la invitación del trombonista Aníbal de Gracia para unirse al concepto “Dejando huellas”, que incluye dos abarcadores tributos a Celia Cruz y Héctor Lavoe, con la particularidad de nuevos coros para algunas de las versiones de “Químbara”, “Cúcala”, “Usted abusó”, “Soy antillana”, “La vida es un carnaval”, “Bemba colorá”, “Juana Peña”, “Barrunto”, “El cantante”, “Periódico de ayer” y “Mi gente”.
El popurrí de Celia lo interpretan Hindy Castillo, Yoko, Melina Almodóvar, Mayte Pérez, Michelle Brava y Nahyra Pérez. El mosaico de éxitos de Lavoe lo cantan NG2, José Luis de Jesús, Juan José Hernández y Juan Pablo Díaz.
Eso no es todo. El clásico “Lágrimas negras” de Miguel Matamoros reúne a Los Andinos, Rey Ruiz, Edgar Daniel, Moncho Rivera, Willie González y Camilo Azuquita.
Si quieren plena, expresión que Aníbal ha cultivado durante los pasados años fusionada con la batucada, “A ti na’ ma”, “Yo me tomó el ron”, dedicada a Chuito el de Bayamón, “El jolgorio” y “El abuso”, que reúne a Víctor ‘Toro’ Muñiz, Tito Matos, Josué Barreto y Miguel Maysonet, cumplen su cometido.
“Desenfunda”, con solos de Prodigio en el cuatro y de Jan Duclerc en la trompeta, evoca a El Gran Combo.
En fin, con “Dejando huellas” Aníbal de Gracia se anota el mejor disco de su carrera. Obligado en Navidad y durante todo el año.
Fundación Nacional para la Cultura Popular
