“La gente sabe cuando cantas con el corazón y cuando es solo por conseguirte el billete. Yo pongo todo en mis presentaciones y los muchachos que están conmigo también”
Cuando Charlie Aponte decidió tomar su carrera en solitario y dejar El Gran Combo algunas personas le llamaron traidor. Pero ahora que han visto sus shows y ha mantenido su creencia de no morder la mano que le dio de comer ven la clase de persona que es.
La popularidad de Charlie y por la calidad de la orquesta que lo respalda, no es raro ver por lo menos dos veces al mes comunicados de prensa de diversos lugares como Panamá o Colombia donde confirman su trabajo.
“Este año me ha ido muy bien; he trabajado mucho más fuera de Puerto Rico y ya tenemos un contrato para despedir el año en Panamá. Los salseros de Panamá son bien exigentes, así que hay que llevar un buen show para decirle adiós al 2016. El apoyo de mi familia ha sido vital en esta etapa y estoy más que agradecido a Dios por tenerlos. Antes que concluya el año me presentaré en Estados Unidos, Colombia y en la Isla”, me comentó.
De hecho, después de su participación en la Feria de Artesanías, donde conversamos, iba raudo y veloz hacia Cabo Rojo, donde se presentaría esa noche. Charlie reconoce que no a todos cantantes que se van de una agrupación les va bien.
“La gente sabe cuando cantas con el corazón y cuando es solo por conseguirte el billete. Yo pongo todo en mis presentaciones y los muchachos que están conmigo también. Los salseros somos fuertes y si algo no nos gusta se acabó y no te respaldan. En mi caso, quizás al principio me vieron con recelo a ver qué traía, pero ahora es todo lo contrario”.
De hecho, el público presente en la feria coreó sus canciones de principio a fin mientras su esposa, a un lado de la tarima, decía “qué bella es la gente con Charlie”; le contesté “y qué divino es Charlie con su público”.
Milly Cangiano
