La sexagenaria Catedral de la Música Latina, Viera Discos, en el justo lindero de la zona histórica entre Miramar y Santurce, en la calle Hoare esquina Fernández Juncos, y que durante años albergó las memorabilias de la música popular, piezas de colección, libros, instrumentos, cuadros, carteles, pinturas, equipo, composiciones y una colección de más de 180,000 mil unidades de ‘long playings’, ya no existe. Todo su contenido se encuentra en dos furgones de 50 pies estacionados en la sede de los Hogares CREA en Trujillo Alto.
“Entregué el 31 de marzo la Catedral, donde una vez estuvo la primera Iglesia Episcopal de Miramar, porque antes había pedido al Tribunal no entregar a rajatabla, por lo que nos concedieron cuatro meses. Procedimos a empacar de una manera responsable, desmontando la tienda y no tener problemas con los clientes. Tuvimos la colaboración de los Hogares CREA –que siempre me han ayudado–, con brigadas de 30 y 40 personas cargando. Alquilé dos furgones de 50 pies con los cuales vacié el edificio”, expresó Richie Viera, administrador de esta empresa cultural.
Embarga, no obstante, una gran tristeza a este promotor de la música popular boricua y latina, porque todas aquellas personas que se ofrecieron para ayudarle, incluyendo alcaldes prominentes, les quedaron mal.
“La gente que nos prometió e hizo compromiso con nosotros, nos quedó mal. Ahora me es indiferente, pero mi padre ha dado sangre por la cultura de nuestro país. Aquí la cultura no vale nada, como el municipio de San Juan, donde todo es baile, botella y fiesta. Ellos ni siquiera se pronunciaron al final. Nos llegaron a enseñar propiedades y me las dejaron en la mano. Les pedí que si me podían ayudar aunque fuera con una estructura llena de cucarachas y basura, que me encargaba de limpiarla y ponerla al día. ¡En mi vida he cogido cupones ni tarjeta de la familia! Pero al pedir un contrato donde me asignaran una edificación por equis término se silenció todo”, agregó.
Las estructuras ofrecidas fueron la Biblioteca Carnegie, pero era demasiado grande, el antiguo Departamento de Salud en Santurce y una escuela en la calle Loíza. Le ofrecieron otro edificio al frente de la disquera que había sido un cine y después un banco. Ese último era perfecto y le expresaron a Viera que tomarían las medidas y se volverían a comunicar, lo que no ha sucedido.
“A Jorge Hernández, director de inventario de propiedades, le hicimos seis llamados y nunca nos respondió. Su ayudante, igual. Reaccionó el licenciado José Orlando López y un grupo que hicieron para apoyarnos compuesto por López, Noelia Quintero, Rafael Jaume y Carmen Yulín Cruz, la alcaldesa de San Juan, a quien informarían. ¡El amor y la cultura no se ruegan! No voy a rogarle a ninguna alcaldesa ¡Que coja los edificios que tiene y cuando yo quiera estructurar Viera Discos, lo voy a hacer yo! Nunca le he dejado una ayuda en la mano a nadie. Una de las entidades más importantes de este país era Viera Discos y la alcaldía nos abandonó”, reiteró.
